Guardia reglamentista y enfadado

 Paré el taxi donde menos podía molestar: 

Zona con dos carriles para cada sentido,a la vez por donde me dijeron las señoras que llevaba

No estaba cerca del cuartel de la Guardia Civil de Fernández Ladreda sino separado, más hacia atrás.

Eligieron pagarme con tarjeta y el datáfono no quiso funcionar

Se acerca un guardia y me dice que lo que él dice hay que obedecerlo y que quite el coche de allí.

Yo le digo que mal puedo obedecer cuando estaba mirando al datáfono y no le había visto.

Debió decir que había raya amarilla continua y yo no le quiero quitar la razón en eso.

Total que les bajó las bolsas a las señoras clientas y me voy sin cobrar la carrera, no sin antes recordarle al enfadado guardia que hay dos carriles con lo que yo no estorbo tanto.

Yo que respeto a los guardias por muchos trabajo heroicos , me quedé enfadado por este picoleto reglamentista y exigenton que aplicó el reglamento sin tener en cuenta las circunstancias concurrentes.